Los talleres mecánicos se parecen cada vez más a laboratorios de computación… ¡y menos a los tradicionales talleres mecánicos llenos de grasa y con olor a combustible! Es que con las nuevas tecnologías y los nuevos diseños de autos computarizados, hoy en día prácticamente bastaría con apretar una tecla para tener un diagnóstico completo del estado del vehículo. Claro que… los nuevos técnicos mecánicos deben tener conocimientos específicos que les permitan interpretar los resultados del escaneo. ¿Quieres saber para qué sirve escanear un vehículo y cómo se realiza? ¡Sigue leyendo!
¿Qué es el escaneo de vehículos?
La posibilidad de escanear un vehículo en la actualidad está al alcance de casi cualquier taller mecánico autorizado. Es posible a partir de tres elementos:
- Un programa de diagnóstico.
- El equipo electrónico que puede ser un celular o computadora.
- El cable de diagnóstico que conecta la computadora con el auto a través de la ficha de autodiagnóstico.
Sin embargo, no siempre fue así. Recordemos que los sistemas computarizados se desarrollaron para minimizar la emisión de gases de combustión a la atmósfera. Al comienzo cada fabricante tenía su propio protocolo de diagnóstico. De esta manera si cualquier usuario tenía un problema necesariamente debía recurrir al concesionario de la marca.
A partir de 1996 se estableció un protocolo universal llamado OBD II (On Board Diagnostic Systems). Además se incorporó al tablero una luz de alarma que al encenderse indica algún problema en el vehículo y la ficha de autodiagnóstico de 16 pines.
Así comenzaron a fabricarse escáneres multimarca y los usuarios pudieron volver a elegir el taller de su preferencia. Actualmente casi cualquier taller puede llevar a cabo el diagnóstico computarizado.
Hay diferentes modelos de escáneres pero la mayoría trae incorporadas las variables de varias marcas, incluso algunos hasta 20 marcas. El escáner da la posibilidad de entrar a los diferentes sistemas bajo el control como electrónica del motor. Por ejemplo protección del habitáculo, sistemas de bolsas de aire, frenos, alarmas anti arranque, y así podríamos seguir analizando todos los sistemas.
Es interesante saber que no se trata simplemente de conectar un cable y listo. La pantalla del programa o del escáner muestra una cantidad de datos, siglas, abreviaturas y códigos. El técnico mecánico debe estar en condiciones de interpretar, así como introducir correctamente los datos del vehículo para que pueda llevarse a cabo el diagnóstico.
¿Para qué sirve escanear un vehículo?
Hasta ahora, si nos preguntamos para qué sirve escanear un vehículo, pareciera ser que la única utilidad del escaneo del vehículo es encontrar posibles fallas. No es poco pero… no es lo único.
Por ejemplo si estamos comprando un auto usado, el escaneo del vehículo nos puede servir para saber si algunos dispositivos del vehículo han sido alterados.
En estos casos es muy útil el escáner de datos “en vivo”. De hecho, la primera información de este tipo de escáner es si la luz del tablero está encendida o apagada. No es un dato menor: muchas veces se quita este dispositivo para que el futuro comprador no sepa si hay fallas o no en el vehículo. Se deben controlar y comparar parámetros con el motor encendido y apagado ya que se van complementando las informaciones.
Además, los datos deben ser consistentes con la realidad; por ejemplo, si el coche está detenido, el sensor de velocidad debería indicar 0Km/h. Un problema muy frecuente es que la aguja del velocímetro se atore o no funcione, por lo tanto la prueba de velocidad debe realizarse con el escáner, para saber si el problema es del vehículo o sólo del sensor o el tablero.
Lo que no aparece al escanear un vehículo
Más allá de las bondades del escaneo del vehículo, es interesante saber que hay al menos cuatro tipos de fallas que el escáner no siempre puede registrar.
Es que el escáner sólo identifica fallas en la parte electrónica del vehículo, es decir, los errores que están codificados y que la memoria del dispositivo puede registrar y guardar.
Las fallas en sistemas mecánicos que funcionan de manera independiente, por ejemplo en la suspensión, no pueden ser detectadas por el escáner. Tampoco las fallas electrónicas puras, como por ejemplo bajas de tensión o presión de la bomba de combustible. En el caso de estar comprando un vehículo usado, dependiendo de la computadora del vehículo el escáner no siempre puede detectar una adulteración en el cuentakilómetros.
Por lo tanto el escáner debe ser considerado como una herramienta de diagnóstico a partir de que los automóviles comienzan a manejarse con sistemas computarizados.
Los técnicos mecánicos deben actualizarse para poder manejar los escáneres de vehículos. Pero también deben saber que hay fallos que sólo ellos a partir de sus conocimientos pueden detectar.
Si la idea es comprar un auto usado con sistema computarizado, te recomendamos consultar nuestro servicio de revisión vehicular. Se revisan más de 350 aspectos claves del vehículo. Entre otros kilometraje real, choques ocultos, estado del motor, chapa y chasis y sistema eléctrico. Este tipo de revisión combina el examen ocular de nuestros expertos con el escaneo computarizado.
Me pareció interesante no sabía qué se podía escanear un vehículo antes de comprarlo
Ya que muchos no coinciden los kilómetros con los años.
Muy interesante, hay muchas cosas que no sabia y tal vez la hubiese pasado por alto, gracias por compartir las